Los ojos que me gustan

Me gustan los ojos que hablan.
Que gimen, que se muestran,
Los que esconden,
Que responden a los mios
Ante miradas certeras.
Los que pueden volar alto,
Y que saben sumergirse,
Que entienden cuando abrirse
y se cierran
Comulgando con el tiempo,
Fraccionando los momentos,
Reteniendo y degustando. 
Me gusta de tanto en tanto
Que se derramen
Como drenando impurezas,
las del alma.
Y que exploten de alegrías,
así naveguen sus ríos nuevamente.
Me gustan los ojos vivos,
Que respiren, que conmuevan,
Que me alteren,
Los ojos de color...
del color que me enamore siempre.
Los que saben mirar bien dentro
los que me lleven afuera.
Tus ojos en mis ojos
que se pierdan.

                               Paulgasé

Soltarme

 

Si pudiera escribir de amores

De caricias, de razones,

De largas siestas contigo

De esperanzas.

Rendirle culto a la Luna

Por convertirme en su aliado

Por confiarme sus secretos,

Y consolarme en su canto.

 

Soltaría mi locura

Liberaría  a mi ángel

Te amaría hasta hartazgo

Completaría mi rito.

Sería el brillo en tus ojos

Y la sombra que te salve

El rastro más perseguido

El presagio de tu grito.

 

 

 

                          Paulgasé

 

esto es así, no da más

Llegó la hora de ponerle fin

A los principios que terminan mal

Porque no sé si yo podre empezar

A concluir lo que promoví 

 

Es el momento de proliferar

Aunque la especie parezca morir

Madurar para sobrevivir

O ser escarnio de la eternidad

 

Y esto es así

Y esto no da más
 

Voy reiterando lo que ya insistí

Pidiendo pista para encabezar

Chupando rueda de tu voluntad

Sosteniendo lo que construí

 

Metiendo fichas a la libertad

Aprovechado de tu buena fe

Voy escondido consumiéndote

Porque yo solo me quiero salvar

 

Y esto es así

Y esto no da más

 

 

                                             Paulgasé

Desperté

Desperté.

Mil brazos me querían y yo,
toda mi existencia
comprimida en tu apetito.

Exploté de sensaciones turbias.

Contra corriente,  
revelado al tiempo confesaba,
solo perseguía amar tu cuerpo.

Tus ojos bailaron mi silencio.

Mis manos cantaron en tu piel.
Imagen de tus amores
de oníricos tormentos.

Clausuradas las ventanas,

demonios inundaron la habitación,
se resquebrajo mi percepción
y ya no pude contenerlos.

Entonces una vez más

te perdía, y de nuevo,

con ese espasmo en el pecho

desperté.

                                            Paulgasé

El yerro

Sumida en vuelo la veo,
la hallé perdida en el centro de mi mente
en lo opaco de mi lecho.

Aludido por su grito,
sigo y me alzo, me asumo rebelde,
me quemo, me derrito.

Por su mano amarga,
se alarga mi pena en mi sueño silente,
me reduce, me aletarga.

Me asombró su paso,
su sombra escasa divisé en el puente
principio del ocaso.

Paulgasé

Recomenzar

 

Si me ves esperando el fin

Partiendo hacia recomenzar

No busques sea  mi perdición

Y  encuéntrame en otro lugar.

 

Tan solo acompañado voy

De nada de lo que forjé

Cargando el eco de tu amor

Imagen de lo que esperé.

 

Y hacia allí yo volaré

Destino de ningún rincón

Erguido en la tempestad

En busca de tu corazón.

 

                         Paulgase

Subiendo y buscando.

 

Forzado de miedos e infancias

A la cresta más alta me alzo

Con más esperas que presentes

Con menos memoria que pasados.

Miro de frente la afrenta

Llevo a la espalda la gloria

Traigo abrigado en mi cuello

Cantares de tirria y victoria.

Hundo mi mano en la piedra

Alzo la vista y me pierdo

Miro hacia abajo y lamento

Que eternices el silencio.

Ya no me engaña el ardid

De quinqués medio apagados

Solo al amor yo me rindo

Y en mi esperanza me engaño.

                              Paulgase