viernes, 19 de mayo de 2017

Intenso

Intenso fue, el poeta avaro con la mujer pobre de amores, aquella que rogaba pasión, la que desprendía fuego, la única que dio todo por sentirse amada. El, con su lengua viva, de su boca incienso desprendía y llenaba los rincones vacios de esa fémina brotada de ausencias y maltratos, de besos perdidos y caricias soñadas. Rocío de miel desplego su labia y quedo la diosa adherida a él, y se comió todo, no dejó ni un hueso el artista amargo que lleno su bolsa de puro placer. Yo soñé a esa reina esperándome, pero yo no puedo, no tengo la magia, solo tengo manos para acariciar, solo tengo besos esperando labios y ojos tan cansados como un bravo mar golpeando la roca. Solo falta un día que ocurra el hechizo, que se aliñe todo en pos de ambos, que a mí no me importe cuanto falta en ella, y ella no espere que sepa volar.

Paul Gasê